Aquella vuelta encontré un lugar muy tranquilo y bien montañero, alto, frío y solitario. Le pegamos una vuelta a la aguja por la derecha y vimos una pared excepcional con una fisura excepcional. No pudimos calcular el tamaño, pero era un imán para los sueños. Al pie de la pared unos bloques gigantes, unas vegas y una vista muy interesante. Paso un año y medio y ese sueño comenzaba a tomar forma, volver allá, instalarnos al pie de la aguja y abrir una ruta pasando por aquel fisurón. un ingreso anticipado del invierno con una gran nevada.
Esta vez el compañero iba a ser otro, mi hermano Cristian. Salimos un Domingo, bastante pesaditos, bah..., como siempre y un poco más porque llevávamos una perforadora a baterías, chapas, parabolts, clavos variados, una masa, ah, y demasiada comida.
Llegamos a los 3500mts y nos fuimos derechos a aquel lugar de las veguitas a 3700mts y nos instalamos con mucho placer. Soñar ó imaginar un lugar ó una manera de hacer las cosas y ver que se van concretando es muy lindo. Nadie había acampado nunca ahí, es un lugar muy alejado y a lo sumo se ve algún sendero de los que utilizan los que van a subir otro cerro.
El entorno es un claro circo claciar rodeado por cerros muy interesantes y con los que ya vamos soñando. En el centro del circo surgen estos picos de granito de unos 120mts de altura el mayor y en el que andaremos trepando.
Lo que se siente al ir a abrir una nueva ruta en una pared es totalmente distinto a ir a repetir, hay más incertidumbre no solo en los días previos, sino mientras el primero va equipando los largos. Uno no sabe que le van a deparar los metros que siguen más arriba. Hay que ir previendo tener disponible tal ó cual medida de friends, ni que hablar de llevar clavos y la masa porque uno puede llegar a un lugar expuesto donde no se puede asegurar con otra cosa, y sin una masa y clavos se esta sencillamente en el horno. Hay otros temas como la calidad de la roca. Muchas veces la ruta arranca por roca excelente y luego uno se mete en un lugar a lo mejor técnicamente fácil pero muy peligroso por las piedras flojas, entonces hay que cambiar de dirección.
También hay que cuidarse de lo que uno se agarra. Como nunca paso nadie por ahí, antes de agarrarse de algo por más grande que sea, hay que desconfiar. Estudiar el tamaño del bloque, su sonoridad al golpearlo, revisar todos sus lados y verificar como esta adherido a la roca principal de la aguja. Esto no es trepar a lo loquito porque uno puede venirse con una heladera para abajo.
Por suerte la línea que desde abajo estudiamos se fue completando largo a largo por roca excelente. Por falta de experiencia en general nos pasó que lo que parecía fácil desde abajo era por lo menos respetable. El primer largo fueron unos 30 mts de cuerda por el lateral derecho de la aguja, con una travesía y dos clavos porque no había otra cosa que poner, la dificultad un 5to.
Hubo dos tramos cortos en los que tuvimos que usar estribos, unos 3mts cada uno, en el segundo y en el 4to largo y eran de una dificultad superior a 6b.
El segundo largo era muy interesante y por roca excelente, 6to grado duro, no habiendo nada para proteger la reunión, colocamos un universal y enseguida hay un arranque a estribos (3mts) de un dulfer en el que no entraban los dedos y solo entraba un microfriend. De ahí para arriba se va por una linea obvia de granito blanco que sigue un espolón de la aguja y se va asegurando en netas y paradas fisuras que salen de a tramos en dulfer.
No habiendo encontrado lugar cómodo para una reunión, a los 40 mts de cuerda armamos un relevo con un stopper, un ángulo bastante decentemente colocado y completamos con friends buenos. De ahí decidimos bajar y fijar cuerda. Justito llega la cuerda de 50mts al piso rapelando directo al acarreo que baja por un lateral de la aguja. ¡A matear! Habíamos escalado tranquilos unas 4horas y no hacía falta amasijarse. La carpa ahí nomás. Para el día siguiente nos quedaba la fisura que nos trajó hasta acá y que parecía ser el punto clave de la ruta. Para los mates nos quedaban las preguntas: ¿qué ancho tendrá? ¿agarrará el 4? ¿se afinará adentro?, ¿habrá forma de asegurarla?
Despues de matear largo y tendido jumareo la cuerda fija y me voy a la primer reunión a intentar dejar chapeado el rapel. Media hora de taladro, dos baterías y lo único que logro es dejar un agujero de profundidad insuficiente en el granito y la mecha destruida.
Evidentemente se agujerea con otra cosa. El granito quema la widia de la punta. Es todo lo que ibamos a hacer con el taladro, los parabolts y las chapas. NADA.... pero teníamos los clavos.
Al día siguiente un largo muy interesante que discurre en una travesía larga hasta un pichote que esta a unos metros de la base de la gran fisura. De más esta decir que en estos largos el segundo va limpiando toda piedra dudosa ó suelta que haya para dejar la vía más segura. De todas maneras no hay demasiada, la roca es muy buena y la línea que seguimos es bastante cercana a lo que es una ruta de escalada con estética. Este tercer largo es otro 5to durito de unos 35mts.
Y ahora viene lo interesante. Llegamos al fisurón y es lo que lo yankuees llaman offwidth, 30cm de ancho parejos hacia adentro y hacía arriba. La pared donde discurre esta hermosa fisura es vertical, naranja y algo desplomada en la parte final. No hay nada en los laterales que permita asegurarla y el único friend 4 que tenemos no sirve de nada. El fisurón debe tener unos 20mts de alto.
Viendo que no se puede hacerle mella, encaramos por un diedro que sube a unos metros del fisuron. Un largo de 6to duro con unos 3mts de 7mo en los que hay que usar estribos porque se terminan las tomas de pie y la fisura del diedro es para dedos finos. Un clavo en el camino, una salida muy pobremente asegurada, un conejo de galera para salir y un total de 45mts de cuerda, llegando a una repisa cómoda con televisores. (4to largo)
En la repisa no hay mucho para hacer en cuanto a una reunión decente con seguros móviles, por lo tanto metemos un par de escelentes clavos y dejamos montado un rapel por si hay que huir. (es buena costumbre dejar las reuniones con los rapeles montados, uno nunca sabe...)
Todo el 4to largo es muy intenso, la escalada discurre por el diedro que forma una pared muy lisa (donde esta el fisuron). La reunión esta en una comoda repisa y uno escala acompañado de una gran sensación de vacio e inmensidad.
Parece que falta poco para la cumbre por terreno más sencillo. Y bueno el 5to largo de unos 30mts de un 6to fácil nos deposita en el borde final de la aguja en un mar de bloques sueltos. Limpiamos lo que podemos arrojando televisores al vacío que explotan divinamente. De ahí vamos para una bonita cumbre coronada por un bloque al que hay que abrazarse para la foto.
Increible, estamos arriba de nuestra primer ruta vista, soñada y abierta. ¡y que linda que es! Abrazos, fotos, dejamos un escudito del GRAM y bajamos caminando. Muy convenientemente la aguja tiene posibilidad por terreno sencillo de bajarla sin rapelar.
En total fueron 5 largos, el más duro el 4to de un 6to grado duro y con pasos de 6c?/A1.
La bautizamos con Cristian: “El Rey del fuego y el León conquistador”, desarrollo 180mts, desnivel 120mts, max. Dif.: 6c?/A1.
Material:
1 juego de camalots completo + 1 #0,75 y 2 microfriends (#0,1 y #0,2)
1 juego de stoppers
6 clavos. 3 universales, 1 lostarrow, 2 angulos.
2 estribos.
1 Oso de peluche
Para repetirla no harían falta clavos, aunque habría que llevar por lo menos 2 para dejar montado el rapel del tercer largo. Desde la base del fisurón se llega con un rapel al acarreo que baja de la parte trasera de la aguja, el cual no dejamos montado.
Estas agujas tienen mucho potencial para abrir rutas muy interesantes aunque lo que resta es por lo menos de la misma ó mayor dificultad que la ruta que abrimos.